Abu Simbel é um complexo de dois templos escavados na rocha, um dedicado a Ramsés II e o outro a Nefertari, sua primeira esposa.
A estrada em meio ao deserto é fechada e o trajeto de 288 quilômetros é feito apenas com escolta policial. Acredito que não seja tão perigoso, já que nos últimos 20 anos foram noticiados apenas três ataques terroristas em regiões turísticas por todo o país.
Devido a construção de uma usina hidrelétrica, a área original dos templos seria inundada pelo Nilo fazendo com que o templo ficasse submergido . Com a ajuda da UNESCO em 1959, foi realizada uma grande campanha internacional de doações e ajuda de especialistas para salvar os belíssimos templos de Abu Simbel. Estudos, cópias, pesquisas, 3.000 homens, 42 milhões de dólares e 5 anos foram necessários para desmontar e reconstruir, entre 1963 e 1968, todos os dois templos.
Como resultado da subida das águas do rio Nilo que estavam prestes a resultar da construção da barragem de Aswan, os templos gêmeos de Abu Simbel estavam sob ameaça. Os Templos de Abu Simbel foram realocados para resgatar os antigos templos das águas do Nilo.
La localización del lugar estaba consagrada a Hathor mucho antes de que se construyeran los templos, y, por lo que se cree, fue cuidadosamente elegida por Ramsés precisamente por esa razón. En ambos templos Ramsés está reconocido como un dios entre los dioses y la elección de un lugar que ya era sagrado no habría hecho sino reforzar esa impresión entre la población. Los templos también están orientados al este, de manera que dos veces al año, el 21 de febrero y el 21 de octubre, el sol brilla directamente en el santuario del Gran Templo, iluminando las estatuas de Ramsés y Amón. Se cree que estas fechas correspondían al cumpleaños y la coronación de Ramsés. La alineación de las estructuras sagradas con el sol naciente o poniente, o con la posición del sol en los solsticios, era una práctica común en la antigüedad (los lugares más conocidos son New Grange en Irlanda y Maeshowe en Escocia), pero el santuario del Gran Templo difiere de estos otros lugares porque la estatua del dios Ptah, una más entre el resto de estatuas, está situada de tal manera que nunca queda iluminada por el sol en ningún momento. Como Ptah estaba asociado con el inframundo egipcio, su imagen se mantenía en oscuridad perpetua.
O Abu Simbel Sun Festival acontece em 22 de fevereiro e 22 de outubro de cada ano com muita fanfarra, com milhares de pessoas reunidas no início da manhã para ver este testemunho do conhecimento e habilidade que os antigos egípcios possuem para alinhar o templo tão perfeitamente .
O templo maior está alinhado com o sol, então duas vezes por ano o sol brilha em seus recessos mais profundos para iluminar uma estátua de Ramsés e os deuses aos quais o templo é dedicado.
O grande templo era dedicado ao deus Rá, embora , no santuário, estejam as presenças de outros deuses e do próprio Faraó Ramsess II. Na entrada, 4 gigantescas estátuas imponentes sentadas cada uma com uma altura de 20 metros, construídas por volta do ano 1284 a.C. No interior, pilares gigantescos dão as boas vindas a quem visita este espetacular templo, onde suas paredes estão forradas com desenhos e hieróglifos belíssimos e coloridos, que contam a história de seu faraó, família, povo, costumes e acontecimentos. O grande templo é considerado o mais bem preservado do Egito.
Para evitar que desaparecessem sob a água por causa da construção da represa de Assuã, os templos de Abu Simbel foram trasladados entre 1964 e 1968. Ao custo de 36 milhões de dólares, os templos foram deslocados para uma zona 65 metros mais alta. Para retribuir a ajuda recebida, o Egito doou importantes tesouros e templos a outros países, como o Templo de Debod, que está em Madrid, ou o Templo de Dendur, que está en Nova York.
Para compreender a potência do maior faraó do antigo Egito, Ramsés II, o único que reinou por 67 anos, basta visitar o complexo arqueológico de Abu Simbel. Os templos colossais, talhados nas formações rochosas de grandes penhascos, guardam uma série de curiosidades que fazem de Abu Simbel, um local único.
Consagrado em reverência a Hathor, a deusa que representa o amor, a beleza, a música, a dança, a felicidade e a maternidade, o templo possui a sua imagem em destaque, cultuada como uma vaca divina, com chifres e um disco solar na cabeça.
Andaimes gigantescos foram utilizados para a reconstrução total que, mesmo com o trabalho extremamente minucioso, conseguiu manter o fenômeno dos raios do sol, tendo a falha de apenas um dia. Atualmente, o episódio ocorre nos dias 22 de fevereiro e 22 de outubro de todos os anos.
Para o transporte o Templo de Abu Simbel teve que ser recortado da rocha original e instalado em um penhasco artificial, a 65 metros para cima da posição original e 210 metros para trás. Similar a um quebra-cabeças gigante, ele se transformou em 1.050 blocos catalogados, pesando entre 7 e 30 toneladas.
Sea cual fuese la fecha del comienzo de la construcción, están de acuerdo en que llevó veinte años construir el complejo y en que los templos estaban dedicados, el Gran Templo a los dioses Ra-Horakty, Ptah y Ramsés II deificado, y el Templo Menor a la diosa Hathor y la reina Nefertari, la esposa favorita de Ramsés. A pesar de que se asume que el nombre, "Abu Simbel" era la designación del complejo en la antigüedad, no es así. Supuestamente, el explorador suizo Burckhardt fue conducido hasta el lugar por un chico llamado Abu Simbel en 1813 d.C., y el lugar recibió su nombre. Sin embargo, Burckhardt no pudo destapar el lugar, que estaba enterrado en la arena hasta el cuello de los grandes colosos, y más tarde mencionó esta experiencia a su amigo el también explorador Giovanni Belzoni. Fue Belzoni quien desenterró y excavó por primera vez (o saqueó) Abu Simbel en 1817 d.C., y se considera que fue él, y no Burckhardt, quien fue llevado al lugar por un chico en honor del cual le puso nombre al complejo. Al igual que con otros aspectos de Abu Simbel, tales como la fecha de su construcción, la verdad que se esconde tras ambas versiones está abierta a la interpretación, y lo único que se sabe es que el nombre original del complejo, si es que tenía una designación específica, se ha perdido.
A entrada do Grande Templo é ladeada por quatro estátuas colossais em sua fachada, estátuas de 20 m, cada uma representando Ramsés II sentado em um trono. A fachada do templo principal está decorada com hieróglifos que comemoram a grande vitória de Ramsés II na Batalha de Kades.
El Gran Templo se alza hasta los 30 metros (98 pies) de altura y tiene 35 metros (115 pies) de largo, con cuatro colosos sentados flanqueando la entrada, dos a cada lado, que representan a Ramsés II en su trono; cada uno mide 20 metros (65 pies) de altura. Bajo estas figuras gigantescas hay estatuas más pequeñas (aun así más grandes que una persona) que representan a los enemigos conquistados por Ramsés: los nubios, los libios y los hititas. Hay más estatuas que representan a varios miembros de la familia y algunos dioses protectores y símbolos de poder. Pasando entre los dos colosos se accede al interior del templo, que está decorado con grabados que muestran a Ramsés y Nefertari rindiendo homenaje a los dioses. La gran victoria de Ramsés en Qadesh, que los expertos hoy en día consideran que fue más bien un acuerdo que un triunfo egipcio, también tiene una representación detallada en la pared norte de la Sala hipóstila. Según los expertos Oakes y Gahlin, estos grabados de los eventos de la batalla,
Cerca encontramos el Templo Menor, con una altura de 12 metros (40 pies) y 28 metros (92 pies) de largo. Este templo también está adornado con colosos a lo largo del frontal, tres a cada lado de la entrada, y representan a Ramsés y su reina Nefertari (cuatro estatuas del rey y dos de la reina), con una altura de 10 metros (32 pies). Queda claro el prestigio de la reina con estas estatuas, ya que normalmente a la mujer se la representaba en una escala mucho menor que la del faraón, mientras que en Abu Simbel Nefertari está representada al mismo tamaño que Ramsés. El Templo Menor también es significativo porque no es más que la segunda vez en la historia del antiguo Egipto que un gobernante dedicó un templo a su esposa; el primero fue el faraón Akenatón, que gobernó de 1353-1336 a.C., que le dedicó un templo a su esposa Nefertiti. Las paredes del templo están dedicadas a imágenes de Ramsés y Nefertari haciendo ofrendas a los dioses y a representaciones de la diosa Hathor.
Todas las estatuas más pequeñas y las estelas que rodeaban el emplazamiento original del complejo también fueron movidas de sitio y recolocadas en sus lugares correspondientes en los templos. Entre estas hay estelas que representan a Ramsés derrotando a sus enemigos, varios dioses y una estela que representa el matrimonio de Ramsés y la princesa hitita Naptera, que ratificó el Tratado de Qadesh. Incluido entre estos monumentos está la estela de Asha-hebsed, el capataz encargado de organizar a los trabajadores que construyeron el complejo. Esta estela también cuenta cómo Ramsés decidió construir el complejo como un testamento imperecedero de su gloria infinita y cómo le confió el trabajo a Asha-hebshed. Hoy en día Abu Simbel es el enclave de la antigüedad más visitado de Egipto después de las pirámides de Guiza e incluso tiene su propio aeropuerto para dar cabida a los miles de turistas que lo visitan cada año.